Hoy me gustaría compartir esta campaña del Centro de Tratamiento de Violaciones de Santa Mónica (EE UU) que mueve el foco de atención de la víctima al posible agresor. Se trata de una serie de posters pensados para ser colgados en universidades y de cuya venta se obtienen fondos para el funcionamiento del centro (más información en este enlace).
La idea detrás es muy simple: la educación para prevenir las violaciones debe incluir a los hombres también. Porque hemos pasado demasiado tiempo enseñando a las mujeres a no ser violadas, y demasiado poco enseñando a los hombres a no violar.
Traducción:
La idea de que los hombres no pueden controlarse sexualmente es un mito
Richard M: “Si la chica con la que estoy ha bebido demasiado, lo dejo correr”
Brian C: “No importa hasta qué punto hayamos llegado. Si ella dice “no” quizás no me guste, pero lo respeto”
Una de cada 6 mujeres ha sido víctima de una violación o intento de violación. La violación también es cosa de hombres.
Traducción:
Cuando tus colegas hablan sobre las mujeres de forma poco respetuosa o sexista, no tienes por qué unirte a la conversación. Diles lo que piensas. Diles que no te sientes cómodo o simplemente cambia de tema. La próxima vez que empiecen a hablar de “putas” y de “zorras” y de las cosas que harían con ellas, diles que lo dejen. ¿No es eso lo que las mujeres de tu vida esperarían de ti?
Traducción:
¿Qué vas a hacer?
Tú quieres sexo, pero ella quiere esperar. Así que sigues intentándolo. Primero te dice que sí. Luego te dice que no. Si no estás seguro… detente y escucha.